Las persistentes lluvias que han azotado República Dominicana desde el pasado viernes han resultado en la lamentable pérdida de al menos nueve vidas, acompañadas de considerables daños materiales, según las autoridades locales.
En las últimas 24 horas, la Oficina Nacional de Meteorología (Onamet) informó que se registraron cerca de 300 milímetros de lluvia en diversas localidades del territorio nacional. El Centro de Operaciones de Emergencia (COE) ha mantenido en alerta a 30 de las 32 provincias del país, elevando a 14 el número de áreas en nivel rojo, indicando una situación crítica.
El boletín del COE revela que 7,915 personas fueron desplazadas de sus hogares, 583 viviendas resultaron afectadas y 29 comunidades quedaron incomunicadas debido a inundaciones, deslizamientos de tierra o crecidas de ríos. Las infraestructuras afectadas incluyen seis carreteras, cinco puentes y un paso a desnivel.
Adicionalmente, la magnitud del desastre se refleja en las cifras de servicios afectados: 1,795,232 personas sin acceso a agua potable, 377,782 sin energía eléctrica, 1,583 viviendas afectadas y 17 completamente destruidas.
La Onamet advierte que se esperan fuertes lluvias, principalmente en el litoral caribeño, el sureste y noreste del país, durante las próximas 48 horas, agravando aún más la situación y generando preocupación en la población afectada.
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